A la hora de proteger nuestros móviles, Android y los iPhone adoptan dos medidas muy diferentes. Mientras que Apple ha apostado completamente por el desbloqueo facial desde el iPhone X lanzado hace ya más de seis años, los fabricantes de móviles Android han preferido continuar en su mayoría con el lector de huellas dactilares.

Aunque algunos móviles Android ofrecen la opción del desbloqueo facial, no es lo recomendable; el iPhone tiene sensores más avanzados que no están presentes en la mayoría de los móviles Android, que dependen únicamente de la imagen de la cámara frontal. Así que elegir un sistema u otro depende en buena medida del móvil que vayamos a comprar; cada sistema tiene sus pros y sus contras.

Eso está cambiando. Poco a poco, el reconocimiento facial fiable está siendo posible con menos sensores y con algoritmos más avanzados; así lo ha demostrado la propia Google con sus últimos modelos de Pixel, que ofrecen reconocimiento facial no sólo para el desbloqueo del móvil, también para pagar con el móvil y para autenticarnos en apps.

Desbloquear WhatsApp con la cara

Ahora a esa lista se le suma WhatsApp, que ya es compatible con el desbloqueo facial del Pixel 8 y el Pixel 8 Pro; la seguridad avanzada de estos dispositivos es lo que permite activar esta función en la app de Android, como apuntan en 9to5Google.

WhatsApp ya incluye una función de bloqueo biométrico, que permite usar nuestra huella dactilar para impedir el acceso a nuestros chats; la lista de mensajes sólo se muestra si tocamos el lector de huellas con el dedo, o si introducimos el PIN, como si estuviésemos desbloqueando el móvil. Es la opción más segura, pero ya no es la única.

En el Pixel 8 y el Pixel 8 Pro, WhatsApp ahora también permite usar el desbloqueo facial para acceder a los chats. Funciona de manera sencilla, al pulsar en la app aparecerá el desbloqueo facial y un anillo alrededor de la cámara frontal, indicando que está buscando nuestra cara; si la encuentra y la reconoce, se desbloqueará como si hubiéramos usado la huella. En caso de que no encuentre nuestra cara, o no la reconozca, después de unos segundos se mostrará el lector de huellas dactilares como segunda opción.

Esta opción es posible porque los nuevos Pixel 8 cumplen los estándares biométricos de Clase 3, el nivel más elevado hasta ahora; lo interesante es que lo consiguen sin necesidad de añadir sensores como hace el iPhone (y por lo tanto, sin necesidad de tener un ‘notch’ o una ‘píldora’ que ocupa espacio en la pantalla). En vez de eso, se basa en algoritmos de aprendizaje automático y el potencial del procesador Tensor G3 para alcanzar el mismo nivel de seguridad.